Cómo mejorar la eficiencia energética en viviendas que ya han sido reformadas.
Imagínate que tu vivienda, reformada hace relativamente poco tiempo, recibe un informe desfavorable en materia de sostenibilidad y eficiencia energética, lo que supondría tener que abordar, de nuevo, una serie de cambios y mejoras con todo lo que ello conlleva.
Pues este supuesto no es tan improbable como parece ya que, en la actualidad, las exigencias en este sentido son cada vez más estrictas, lo que puede hacer que muchas viviendas ya reformadas se queden obsoletas en poco tiempo y requieran la revisión de ciertos aspectos relacionados con la eficiencia energética y el consumo responsable.
Además, no es extraño encontrar casos en los que se ha llevado a cabo una reforma reciente centrada en la distribución de espacios, en los acabados interiores o incluso en algunas instalaciones, pero sin una estrategia integral de mejora de la eficiencia energética.
La pregunta que nos formulan los propietarios en esta circunstancia siempre es la misma: ¿cómo mejorar la eficiencia energética sin tener que afrontar una obra invasiva, especialmente en esos casos en los que la vivienda está ya reformada y habitada? Pues este es el tema que hoy nos gustaría abordar en este nuevo artículo de nuestro blog.
Qué hacer para mejorar la eficiencia energética en tu casa reformada
Afortunadamente, existen soluciones reales y efectivas que, con una escasa intervención constructiva, consiguen que una vivienda sea más eficiente y respetuosa con el medioambiente:
1.- Mejorar el aislamiento térmico mediante sistemas superpuestos:
La colocación de paneles aislantes delgados aplicables sobre paredes interiores o trasdosados en seco son una solución sencilla y efectiva para mejorar la eficiencia energética. Estos productos pueden instalarse sin necesidad de desmontar muros ni realizar obras pesadas, y ayudan a reducir las pérdidas térmicas de forma significativa.
2.- Sustituir ventanas o el acristalamiento de las mismas:
Es fundamental evaluar el comportamiento energético de las ventanas e introducir aquellas mejoras necesarias para que este elemento contribuya a mejorar la eficiencia energética de la vivienda. Como sabes, las ventanas son uno de los puntos críticos en los que se puede escapar el calor en invierno y el frío en verano que procede del sistema de climatización.
Si las ventanas se han sustituido en la reforma reciente, igual basta con cambiar solo el vidrio por uno bajo emisivo (tipo Climalit con control solar), una intervención suficiente que no requiere ni cambiar el marco. También existen láminas aislantes de control solar que se adhieren sobre los cristales existentes y reducen la entrada de calor en verano y las pérdidas en invierno.
3.- Introducir un sistema domótico de automatización y control inteligente de consumo:
La instalación de termostatos programables, sensores de presencia, enchufes inteligentes o sistemas domóticos básicos permite optimizar el uso de la energía en función de las necesidades reales. Este tipo de dispositivos, cada vez más accesibles, se instalan sin obra y ayudan a reducir el consumo sin alterar la estructura de la vivienda, mejorando la eficiencia energética.
4.- Cambiar a una iluminación eficiente:
Es otra vía inmediata y sin obras para mejorar la eficiencia energética de una vivienda ya reformada. Sustituir luces halógenas o incandescentes por luces LED regulables no solo reduce el consumo, sino que también mejora la calidad de la luz y prolonga la vida útil del sistema.
5.- Incorporar energías renovables como paneles solares térmicos o fotovoltaicos:
Es otra forma de mejorar la eficiencia energética sin realizar obras, ya que estos paneles se instalan en cubiertas o terrazas sin obra mayor y permiten reducir la dependencia de la red y mejorar la calificación energética del inmueble. Algunos modelos actuales incluso se conectan directamente a enchufes domésticos, facilitando su uso sin intervención estructural.
La verdad es que es una faena haber reformado una vivienda hace poco tiempo y tener que adaptarla a las actuales exigencias energéticas. Pero piensa que, en muchos casos, con gestos como estos, poco invasivos y sin apenas obras, podrás conseguir los objetivos propuestos y mejorar la eficiencia energética de tu vivienda reformada.
En todo caso, ya sabes que el primer paso es obtener una valoración experta como la que podemos brindarte el equipo que formamos el estudio de arquitectura Miguel Ángel Calvo, expertos en diseño y arquitectura sostenible en Barcelona.
Una valoración que lo ideal sería realizarla antes de acometer la reforma para que así, probablemente, evites hoy estar pendiente de estas nuevas pequeñas mejoras.