Reformar y rehabilitar son verbos que hacen referencia a dos realidades distintas, aunque muchas personas los utilicen indistintamente.
De hecho, reformar y rehabilitar son dos proyectos diferentes tanto por el objetivo que persiguen como por el tipo de obras que se acometen en cada uno de ellos. Como expertos en rehabilitación de edificios en Barcelona hoy vamos a contarte cuándo estamos ante una reforma y cuándo ante la rehabilitación de una vivienda.
Una reforma de la vivienda
Cuando una persona dice que quiere “reformar su cocina” o “cambiar su cuarto de baño”, lo que necesita es emprender una serie de acciones orientadas a modificar, ampliar o mejorar ciertos aspectos estéticos y/o estructurales de esa parte de su casa, pero que en ningún caso lo hace porque se encuentren en mal estado.
Por ejemplo, cuando una persona nos contrata para realizar una reforma integral de su piso en Barcelona porque quiere redistribuir el espacio que poseen las diferentes estancias, estamos ante una reforma ya que el cambio o desplazamiento de tabiques se ha hecho para modificar la distribución de la casa, no porque estuvieran en mal estado. Algo parecido ocurre cuando se sustituyen los suelos o las ventanas, que aunque pueden ser más o menos viejos, con su cambio se persigue mejorar la estética y confort general de la vivienda.
Una rehabilitación de la vivienda
Sin embargo, en un proceso de rehabilitación se cambian o modifican elementos estructurales por encontrarse en mal estado o estar obsoletos, siendo necesaria su sustitución para garantizar la perfecta conservación de la vivienda, su estabilidad y resistencia mecánica así como el aislamiento o impermeabilización de la misma.
La rehabilitación no solo abarca obras en el interior de una vivienda sino también en su cubierta o fachada.
Volvamos a poner un ejemplo, cuando una vivienda sufre filtraciones provenientes de su tejado porque este se encuentra deteriorado o es muy viejo, es necesario acometer una obra que repare su estado para pasar posteriormente a aplicarle un tratamiento impermeabilizante. En este caso, estaríamos hablando de una rehabilitación, ya que se han modificado o sustituido elementos para mejorar un aspecto de la vivienda que estaba en mal estado y que ponía en peligro su estructura, confortabilidad y conservación.
Ahora bien, una vez explicado esto es cierto que, en ocasiones, cuando una vivienda necesita modificar ciertos aspectos por encontrarse en mal estado (por ejemplo, la cubierta) sí puede aprovechar la situación en la que va a embarcarse para reformar otros aspectos que ayudarían a que su vivienda fuera mejor.
En Miguel Ángel Calvo Estudio de Arquitectura realizamos tanto la reforma como la rehabilitación de edificios en Barcelona. Ponte en contacto con nosotros si te acabas de comprar una vivienda y quieres reformarla íntegramente antes de entrar a vivir o si lo que necesitas es rehabilitar una parte de la misma.